La
conciencia se despierte,
no se duerma
la memoria,
ni se olvide,
que se
repite la suerte
del que,
olvidada su historia,
la revive.
¿Qué fue de
aquellos errores
y de los
hechos que tanto
espeluznaron?
¿Qué pasó
con los honores
y los
dineros que unos cuantos
nos robaron?
Si es cierto
que entre los ciegos
el que sólo tiene
un ojo
es el rey
entre tantos
bandoleros
“todo lo que
puedo cojo”
es la ley.
Y así nos
toman el pelo
y como a chino
mandarín
nos engaña,
aquél que
con tanto celo
oculta de Urdangarín
su patraña.
Non es fraude
fiscal, non
aunque haya
defraudado
no es delito.
Y parte de
lo que Aizoon
defraudó en
el pasado
ya ha
prescrito.
No importa
si la mitad
de la firma,
pertenece
a su chica.
Pues la
responsabilidad
con ella se
desvanece
y no aplica.
Qué gran
lección de honradez
nos dan
nuestro gobernantes
a diario
que sin
trampa ni doblez
demuestran
su gran talante
solidario.
Cómo
asombramos al mundo.
Cómo todas
las naciones,
fascinadas,
ven este ejemplo
rotundo
de
protección de ladrones,
deslumbradas.
Y mientras
todos los bancos
declaran más
beneficios
por doquier,
los parados
ya son tantos
que ya no
quedan oficios
para hacer.
Se invierten
muchos millones
en rescatar
a cabestros
empresarios,
y se recorta
en pensiones,
y a médicos,
a maestros,
funcionarios.
Y luego, si
a algún amigo
un tribunal pone
pena,
por taimado,
siempre le
queda el abrigo
de que
cambien su condena
a indultado.
No se sabe cómo
y cuando
devolverán los
banqueros
tanta ayuda
con sus
cuentas engordando
gracias a nuestros
dineros
¿quién lo
duda?
Ya van dos
años cumplidos
de la toma
de gobierno
por Rajoy
con los
impuestos subidos
cuesta más
comer pan tierno
hoy por hoy.
Un varón
hecho y derecho
cuando ya no
sigue el juego
de sus jefes
a la cárcel
va derecho
y no sirven
ni los ruegos
ni las
preces.
Y así el buen
tesorero
se queja de que en
el trullo
se malvive.
Está
enseñando el plumero
y aunque
jure: Yo no huyo,
preso sigue
¿Qué fue de
tanta promesa?
Del programa
electoral,
¿Qué se hicieron?
¿Qué fue de
tanta riqueza?
¿Qué fue de
aquél bienestar
que prometieron?
Seis millones
de parados
Pero la
culpa no es mía,
Os lo juro
Es de aquel
otro tarado
que dejó la
economía
si un duro
Y aquí a
nadie se le pide
que dé
detalladas cuentas
de sus
actos,
porque todo
se decide
y se tapan
las afrentas
con los
pactos.
Si tú me das
yo te doy
y cuando tu ciclo
vuelva
de mandato
recuerda bien
que Rajoy
arregló la
ley de huelga
sin recato.
Si los
derechos sociales
son caros
para el estado
de derecho
con dos
decretos cruciales
se recortan,
y al pasado
van derecho.
Tanto
asesor, tanto cargo,
tanto sabio consejero
que pagamos
¿acaso
sirven de algo?
¿qué hacen
con el dinero
que les
damos?
De
agricultura, Cañete.
De Sanidad,
Ana Mato,
Gallardón,
que a todos
pone en un brete,
pues a
cualquier mentecato
da el perdón.
De guindos,
Economía.
En Hacienda
está Montoro
que sostiene
que la
infanta poseía
por toda la
piel de toro
muchos
bienes.
En fin que
dentro de poco
volverán a
prometer
lo imposible
diciendo “que
viene el coco”
si no
vuelves a creer
lo increíble.
La
conciencia se despierte,
no se duerma
la memoria,
ni se olvide,
que se
repite la suerte
del que,
olvidada su historia,
la revive.
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