Recuperando
a Virgilio y su Eneida, "Possunt quia posse videntur." –Pueden los que
creen que pueden-, da la sensación de que las cosas no se arreglan por pura
negligencia, pura incapacidad o por cobardía. O una perversa combinación de todas
ellas.
El
hecho cierto, aunque se me tache de antipatriota, es que llevamos arrastrando una
crisis económica, de valores institucionales y de mangoneo a todos los niveles
desde hace mucho, mucho tiempo. Y no es menos cierto que ni los de antes ni los
de ahora han no han hecho mucho por resolver o atajar el problema, ni en su
conjunto ni por partes.
A. Einstein
decía que “No se puede resolver un
problema usando los mismos razonamientos que se utilizaron cuando se originó”. En el
lenguaje corporativo, que tan brillantemente empleaba Díaz Ferrán, se dice que las
soluciones de ayer no valen para los problemas de hoy.
Repasemos
los 10 problemas que hoy nos agobian, las soluciones de ayer adoptadas y las
soluciones que hoy habría que tener la audacia de implantar. El
orden es completamente aleatorio y no implica mayor o menor gravedad.
PROBLEMA: BANCOS Y CAJAS DE AHORRO MAL
GESTIONADAS Y CON PÉRDIDAS.
Solución cobarde:
Inyectar dinero a través del FROB, incluso dinero público.
Solución valiente:
Dejar que quiebren, como hizo Islandia.
PROBLEMA: CORRUPCIÓN POLÍTICA
GENERALIZADA.
Solución cobarde:
Tratar cada caso como un hecho aislado. Esgrimir la presunción de inocencia
aunque estén pillados con las manos en la masa. Carpetazos generalizados.
Solución valiente: Desposesión
inmediata de privilegios para cualquier político o personaje VIP imputado. Juicios
sin proyección mediática y estricta aplicación de las leyes. Que devuelvan todo
lo trincado. Y cárcel si procede, que escarmienta mucho.
PROBLEMA: GASTAR MÁS DE LO QUE SE
INGRESA.
Solución cobarde:
Incrementar los niveles de endeudamiento, generando más déficit.
Solución valiente:
Ajustar los gastos a los ingresos, suprimiendo los superfluos y minimizando el
resto.
PROBLEMA: FUNCIONES VARIAS VECES
DUPLICADAS EN LAS INSTITUCIONES PÚBLICAS.
Solución cobarde: Mantener
la situación actual pagando varias veces por la misma función sin incremento de
la eficacia.
Solución valiente: Suprimir
de raíz toda institución que realice tareas duplicadas o solapadas.
PROBLEMA:
FALTA DE TRANSPARENCIA EN LAS FUNCIONES PUBLICAS DE AYUNTAMIENTOS,
CORPORACIONES LOCALES, DIPUTACIONES, CONGRESOS Y GOBIERNOS AUTONÓMICOS, CORTES
GENERALES, SENADO, Y PODER JUDICIAL, TRIBUNALES, ETC.
Solución cobarde: Promulgación
de una Ley de Transparencia de circunstancias.
Solución valiente: Una
Ley de Transparencia que incluya a los partidos políticos, sindicatos, Casa
Real y el patrimonio de los 21.000 organismos públicos de España.
PROBLEMA: INSTITUCIONES VACIAS DE
FUNCIÓN Y DE CONTENIDO, COMO LAS DIPUTACIONES Y EL SENADO.
Solución cobarde: Protegerlas
a toda costa como “arabesco lateral”
para refugio de afines y simpatizantes, asignando elevados presupuestos para su
mantenimiento.
Solución valiente: Suprimirlas
y redistribuir sus elevados gastos en beneficios sociales.
PROBLEMA: ELEVADO NÚMERO DE ASESORES
PÚBLICOS.
Solución cobarde:
Mantenerlos como premio para personas políticamente afines, sin tener en cuenta
que tienen que asesorar muy muy mal, tal como va el país.
Solución
valiente: Reducirlos a la mínima expresión y siempre en función de sus
resultados, de acuerdo con las competencias para las que “asesoran”.
Claro
que pueden pensar en que un golpe de fortuna o alguna intervención divina
arreglen la situación por sí sola, sin tener que recurrir a medidas valientes.
Virgilio tiene también una frase para esto: “Audaces Fortuna iuvat” La Fortuna ayuda a los valientes. Y otra
más, para los creyentes: “Los dioses
ayudan a los que se ayudan a sí mismos mediante el trabajo honesto”
Vamos, que no quieren.
No puedo estar mas de acuerdo, llevas toda la razon, no parece tan dificil pero hay que tener un par......
ResponderEliminarBastaría con querer, aunque no se tenga el par, pero....
EliminarEsta Garza se nota que es libre, por su sentido común y su coherencia
ResponderEliminarGracias, aunque en realidad es vox pópuli, pero seguimos esperando...
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