Luis
de Evreux, hermano del rey navarro Carlos II, fue conde de Beaumont-le-Roger y a la sazón duque de Durazzo por su matrimonio con Juana de Sicilia, duquesa de Durazzo, hija de Carlos de Sicilia, de la rama de Anjou-Tarento... Su ambición de
poder le llevó a conseguir el dominio de Albania
y Durazzo al mando de una Compañía
de Mercenarios navarros y gascones, que cobraban 30 florines aragoneses de
oro al mes.
Carlos le ayudó en su intento de reconquistar Durazzo y
el Reino de Albania, donde la dinastía angevina se había mantenido hasta 1368,
cuando el caudillo albanés Carlos Topia
se apoderó de Durazzo. Hasta el
mismísimo rey de Francia le donó 50.000 ducados para su aventura.
Alfonso
Ungría recreó en 1984 esta página de la historia en su película
La
Conquista de Albania.
Hoy no hay compañías de mercenarios a la usanza medieval.
Más bien hay miles de parados que, como en los buenos tiempos de los 25 AÑOS DE PAZ (Para Alemania Zumbando),
recorren Europa con la esperanza de encontrar un trabajo acorde con su
preparación que en su propio país se les niega.
Leo con estupor que el 25% de los mendigos de Madrid son licenciados universitarios. Imagino los
esfuerzos personales y familiares para conseguir superar una carrera
universitaria para llegar a mendigar por las heladas y aterradas calles de
Madrid, con licenciatura o sin ella.
Hoy los jóvenes con cierta preparación, espíritu de
aventura, y don de lenguas se van a buscar los garbanzos (o las habichuelas)
fuera del terruño. A Inglaterra, a Francia, a Alemania, a USA…y a Albania.
¿Y qué hace mientras tanto Mariano el marrano? Sacar
pecho, presumir de reformas, pelearse con toda la oposición y parte de su
propio grupo político, no querer ni oír hablar de sus antiguos tesoreros, echar
balones fuera y presumir de votos, sin considerar que se le dieron por creer que
haría lo que prometió hacer.
Se dice que un gallego es un señor al que te encuentras
en una escalera y nunca sabes si sube o baja. Con este gallego no se sabe si gobierna
o es gobernado, no se sabe si decide o es inducido a decidir y no se sabe si tiene
un plan o planea tenerlo. Lo que sí se sabe es que la tasa de paro es
insostenible, que el desempleo juvenil es escandaloso y que los recortes, en
lugar de hacerse sobre cosas inútiles (senado, duplicidades, y demás) se hacen
sobre sanidad, educación y pensiones. De hecho, cuanto más inculto es el
pueblo, parece que se le puede manipular mejor.
Y para colmo, en las manifestaciones que se suceden día
sí, día también para hacer notar que mucha gente considera que se equivocó al emitir
su voto, hay más gente de más de 60 años que de menos de 40.
Total, si el propio Unamuno
llegó a proclamar su “¡qué inventen
ellos!, para qué molestarse. Que inventen
cosas, decía, que ya nos aprovecharemos de ellas. Con anterioridad, en una
carta dirigida a Ortega y Gasset, en
1906, Don Miguel escribió: “Yo me voy sintiendo profundamente
antieuropeo. ¿Que ellos inventan cosas?, invéntenlas.”
Por desgracia, Europa ha inventado una cosa llamada ajustes y recortes, que poco o nada
tiene que ver con la ciencia del bienestar y que nos son de obligada aplicación
quiérase o no.
Espero que nuestros emigrantes locales vuelvan de sus
particulares Conquistas de Albania a
tiempo para remediar esto. De lo contrario habrá que levantar en pie de paz a
toda la población para ver si se entienda de una vez que un voto, incluso un
voto convencido, NUNCA ES UN CHEQUE EN
BLANCO.
Otra vez nos gana Alemania, por esos campos europeos se comenta que les ha tocado la loteria con la crisis del sur de europa, pues estan recibiendo inmigración cualificadisima. Se lo ponemos a huevo.
ResponderEliminarSí, pero somos bicampeones de Europa y aspiramos a serlo del mundo.... así nos luce el pelo.
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